Sonreir ante la cámara

No es muy complicado diferenciar una sonrisa falsa de una que es sincera. Si bien es cierto que hay personas con más talento para disfrazar una sonrisa falsa y que parezca real. Este es uno de los pocos gestos que podemos manejar a nuestro antojo. Sin embargo, hay un pequeño detalle que diferencia a una natural de otro artificial: los ojos. El psicólogo Paul Ekman ha identificado que en las sonrisas falsas no aparecen las tradicionales líneas alrededor de los ojos que sí lo hacen cuando estas son certeras.

María es la Modelo que aparece en esta imagen, con una sonrisa
bonita y natural.

Una sonrisa verdadera, mueve los músculos de los labios, el músculo cigomático, estirando la comisura de los labios, también intervienen otros músculos que mueven las mejillas y el músculo Orbicular que actúa sobre los párpados de  los ojos.
La sonrisa falsa, tan solo mueve la comisura de los labios, por lo que hay una serie de músculos que no interactúan, por lo que la sonrisa deja de ser real.
Podemos practicar ante el espejo, para mejorar nuestra sonrisa fotográfica.